Sinopse
Ángel Fernández-Santos escribe sobre "La buena vida"
«... "La buena vida", película completamente hermosa y emocionante, donde corre y se desborda con el añadido de dificultad de que David Trueba ahora es también quien la materializa en imágenes esa antigua agua que crea sed en vez de calmarla y en la que flota la escurridiza materia de que está hecho el talento, la capacidad de algunos humildes -el único abono imprescindible para que el talento aflore es la humildad- jugadores a dioses que les permite dar forma a lo informe, hacer luz con sombrío, convertir lo duro en tierno y lo inefable en dicho.
Los ojos del instinto
David Trueba es un cineasta de esta gran estirpe. Las porosas, vivas pese a ser mortecinas -pues sonriendo nos cuentan que bajo el despertar del sexo asoma el hocico la primera percepción de la muerte-, imágenes por donde discurre "La buena vida" son indicio de que detrás de ellas hay un artista capaz de situar su oficio a la altura de los ojos d